El Día Después…

Jóvenes, familias, niños…, comida vegetariana y muchos mates, alguna que otra lata de cerveza… Aire Libre, pasto y una lona para no ensuciarnos.

Es viernes 10 de febrero y el gran Pedro Aznar junto a Roxana Amed fueron convocados para el primero de tres recitales folclóricos, en el anfiteatro de Costanera Sur, organizado por el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.

Sin embargo, tanto Pedro como Roxana cedieron su lugar, y más allá de haber sido un muy lindo concierto, fue un reencuentro luego de tanto dolor, un espacio para abrazarnos y acompañarnos, para mimar nuestras almas en pena, abatidas por la partida física de LUIS ALBERTO SPINETTA, y  aunque nadie se conocía, aunque nadie se hablaba con el desconocido de al lado, ese viernes de verano fue el día después, fue ese día en que todos sabíamos que había que seguir viviendo.

Reunidos con Pedro, Roxana y toda la multitud presente en el lugar, volaba sobre nosotros la esperanza de que el dolor no duela tanto y recordar al Flaco, SIEMPRE, entre acordes y canto, entre acordes y canto, entre acordes y canto…

Por Mariana Burgio