Luego de buscar enérgicamente por cuanta disquería de la Ciudad de Buenos Aires, Provincia y otras provincias me crucé, conseguí "
La era del Sonido" de
Pablo Dacal y
la Orquesta de Salón. Costó pero el disquito llegó a mis manos; más allá del mínimo disgusto que se da cuando uno y otro encargado de disquerías dicen NO ante la pregunta de si tienen un disco...se había generado en mí ese saborcito lindo de búsqueda de este álbum perteneciente a la llamada "música independiente". Finalmente, el pasado sábado en la Feria del Disco lo ví y lo tomé fuerte entre mis manos.
De formato (cajita) similar a un viejo simple, "La era del Sonido" guarda música copada. Una orquesta juega con la voz inconfundible de Pablo. Tal vez dos de las canciones que por ahora más destaco ("por ahora" ya que uno siempre tarda en metabolizar y pensar la música) son
Zamba del fin del mundo -"¿Por qué no estamos algo de tiempo de acuerdo en algo?", canta Dacal- y la instrumental
Fantasía, que sin ánimos de ser redundante es "fantástica", ideal para tener de fondo al leer un cuentito corto o simplemente especial para bailar un poquito. También letras simpáticas surgen en
San Valentín,
La guitarra y el bolsón y
Fantasmas.
De formato (cajita) similar a un viejo simple, "La era del Sonido" guarda música copada. Una orquesta juega con la voz inconfundible de Pablo. Tal vez dos de las canciones que por ahora más destaco ("por ahora" ya que uno siempre tarda en metabolizar y pensar la música) son Zamba del fin del mundo -"¿Por qué no estamos algo de tiempo de acuerdo en algo?", canta Dacal- y la instrumental Fantasía, que sin ánimos de ser redundante es "fantástica", ideal para tener de fondo al leer un cuentito corto o simplemente especial para bailar un poquito. También letras simpáticas surgen en San Valentín, La guitarra y el bolsón y Fantasmas. 
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