viernes, 20 de mayo de 2011

El arte es una cinta de Moebius

Tomó una cinta de papel y pegó las puntas girando 180 grados una de ellas. Con pulso firme, comenzó a cortar por el medio de la hoja. Allí estaba la cinta, aún unida, pero más fina y larga. En la biblioteca se reían los libros de Borges y Kafka que recordaban las viejas paradojas de Zenón de Elea.

Deslumbrado, volvió a cortar la cinta de la misma manera. Una nueva banda se ataba a la anterior, y ambas se encontraban unidas formando aún parte de un mismo todo. El resultado lo incomodaba, como aquella pintura de Maurits Escher que retrataba una corriente de agua infinita e imposible. Desde la otra pared, un camino de escaleras sin fin parecía guiñarle un ojo.


Un tanto frustrado y otro tanto furioso, tomó una nueva cinta y decidió cortarla de la misma manera, pero más cercano a uno de los bordes y no tanto al centro. Una gran bola de papel se le presentó en las manos, pero esa superficie blanca aún formaba parte de un todo. De fondo, una obra de Johann Sebastian Bach se repetía continuamente. Claro, el arte se había adelantado una vez más y se había encargado de insinuarle las facetas más hermosas del infinito.




1 comentario:

  1. Gracias!!! estuve toda la mañana y gran parte de la tarde escuchando y disfrutando la musica que tienes...

    interpretes que no conocía muy buenos... seria buenisimo tener mas datos de tus preferencias...

    saludos desde Chile...
    Felipe

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