El rock progresivo italiano

Parece ser que el hombre tiene una necesidad biológica de etiquetar todo bajo rótulos estructurados, construyendo géneros, especies o grupos de objetos que tienen las mismas características. La música, como toda actividad humana, no escapa de este sistema que en ocasiones nos permite ordenarlos, pero en otros casos termina por confundir con su viciosa tendencia de encontrar grupos cada vez más ínfimos.

El rock quizás haya sido el más afectado por los miles de subgéneros que se diferenciaron y a su vez por las divisiones de la que estos subgrupos fueron víctimas. Una de las etiquetas que musicalmente poco agrega a la hora de un posible análisis es sin dudas la del país de procedencia. Son pocos los casos en los que todas las bandas de una zona geográfica tienen el mismo color musical, por lo que la etiqueta aparece en la mayoría de los casos como antimusical.

Sin embargo hay excepciones. Uno de los ejemplos más claros es el “Rock progresivo italiano”, que en la década del 70 supo diferenciarse claramente del movimiento que se extendía en Europa, Estados Unidos y, posteriormente, el resto del mundo. Este sub-género logró una mezcla del rock con motivos típicos de su folklore como la instrumentación, los aspectos corales, entre otros. Seguramente  en otras partes del mundo se intentó combinaciones con las músicas tradicionales de la zona (América Latina no fue la excepción), pero en Italia no fueron intentos aislados de una banda, sino que fue un movimiento que supo unir a varios grupos (Banco del Mutuo Socorsso, Premiata Forneria Marconi, Le Orme, Campo di Marte, entre otros) que lograron sobresalir a nivel nacional e internacional en una misma época.

En nuestro país, el conjunto que logró dejar su huella más marcada fue sin lugar a dudas PFM. Con sus dos primeros long plays, “Storia di un minuto” y “Per un amico” (ambos de 1972), cautivó a gran parte del público criollo que recibió con gran alegría los trabajos de los europeos. Aún hoy, a 39 años del lanzamiento de aquellos discos, un grupo de Facebook pide que el conjunto arribe a tierras argentinas.