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Tres de la madrugada. El silencio de la 
habitación es destrozado por un desbaratador 
sonido. Alguien llama por telefono. Despierto como de una pesadilla y descuelgo
furioso. Mientras levanto el tubo observo la hora.Digo: ¡Hola!, Del otro lado, un 
sollozo. Comienzo a gritar como un loco, algo pasó y no se que pueda ser. Me secuestra 
la incertidumbre y me decidoa prenguntar: ¿Qué pasa? ¿Quién es? . Comienzo a 
desesperar , pero nadie me contesta. De pronto , un tremendo golpe tira abajo la puerta. 
Puedo ver una silueta oscura. No , parecen ser dos. En fin, el auricular en mi mano grita: 
¡Nooo...! Y se cprta la comunicación. Abro mis ojos, pero no distingo quien ha entrado.



Quedo sin reacción, sentado en la cama y esperando lo peor. El sujeto me golpea y sin

poner resistencia me desvanezco. Cuando vuelvo a abrir mis ojos me encuentro 
asfixiando con la cabeza encapuchada. Intuyo donde estoy , aunque no lo sé con certeza.
Presiento que algo anda muy mal y quizas nunca estuve tan acertado. Mis sentidos se 
agudizan, pero otros contaran la historia por mi. 













Por David Rodriguez